viernes, 15 de abril de 2011

ARDE EL SOL


                                    









Inesperado momento,
inexplicable movimiento, 
de ojos hacia un lugar que pueda calmar...

Inexperto mi estómago y mis letras anteriores,
en cada atardecer,
en cada canción que superior,
mariposea lentamente hasta encontrar un fin.

Arde el sol en una única voz,
vuelven tus palabras
ante mi admiración...

Munición de juventud,
en esta guerra tu explendor
cubre cada sonrisa con algo mejor.

Esperanza en la misión de un poema
que vuele hasta llegar a ti,
en cada estrella,
en todos los cielos que puedan existir...

Calor para un sueño,
sabiendo que estás ahí,
por muy imposible que a veces parezcan las cosas,
destrozando miles de hojas de papel,
rechazando cualquier tipo de derrota...

Reconozco, sensación descontrolada,
en este juego la prueba superada
son las horas que avanzan y avanzan,
como a un mar de inútiles deshaogos.

Arde el sol en una extraña primavera,
retorna un 25 de junio sin noción,
el tiempo que camina es para valientes,
quizás con la inconsciencia presente,
tempraneros en amaneceres,
rigurosos de realidad.

Polvora en excasos años juveniles,
que no suficientes,
golpean la trinchera de todas letras
que aún pueda,
que aún quiera escribir...


(c) 2010