domingo, 28 de octubre de 2012

Delirios de inconsciencia


















Tu sonrisa es el incienso que me hace respirar,
tus besos son la existencia de mi vida,
esa misma que se duerme harta de esperar.
Descubro entre susurros de almas extranjeras,
delirios de inconsciencia, búsqueda de tus ojos,
el mar no perdona y camina sin mirar atrás.
A través de una mirada y un adiós,
puedo resucitar un sentimiento cada vez más lejano y más extraño,
he rezado a la nada sin ningún resultado,
has ganado golpeando un murmullo y mil palabras.
Pensamiento que cierra una cicatriz y avanza la calma,
delirios de inconsciencia,
¿Qué necesitas para huir de la esperanza?
Universo de sensaciones a tu alrededor,
nada es imposible siempre que tu quieras,
siempre que puedas apagar el límite de tanto querernos,
¿Dónde está cada instante de esa vida?
¿Dónde se lastiman unas manos prodigiosas en este breve silencio?
En una noche de desvelo tradicional,
en una charla más, de esas que acariciaban una amistad,
en esos delirios de inconsciencia que ahora anudan sin desear,
el paso del tiempo, el orgullo tembloroso,
la sequedad de una libertad que no tiene sentido al despertar.
Cada respuesta a una pregunta me hace pensar
que la vida es tan jodida a veces como incondicional.
¿Dónde está momento de esa vida?
¿Dónde lloran las manos que en tu cuerpo deliraban de emoción?
Ha pasado tanto tiempo insensato ahora trato de experimentar,
quererte desde la sencillez de mirar la luna
y no hacer nada,
imposibilidad de movimientos,
el corazón también piensa y habla una vez más.
Delirios de inconsciencia, enfermedad que construye mi interior
como si golpease este sueño desconocido hasta morir,
morir sediento de tu amor...




(c) 2012