sábado, 14 de abril de 2012

Quédate conmigo


Todos los días...
El viento esconde la sensación de volar y gritar,
quédate conmigo.
Todas las horas...
El aire que respiro es mentira,
tan incierto como lento,
tan espeso como un poeta y las cenizas de su propia vida,
la luz poco a poco se apaga...

Quisiera  juzgar al tiempo por tratarme así...
Sentir tu mirada universal
que envuelve mi mundo allá donde voy.
Quizás después de hacerte tanto daño,
la  mística visión de un sueño
borra lentamente esa sensación de nitidez en tus ojos.

En lo imposible de tu presencia,
en la altura de mi espanto espiritual,
Un jazmín de nostalgia vuela y grita,
quédate conmigo,
esta noche por favor, quédate conmigo...

(c) 2012