No quiero lastimar la paz de tus sueños,
no es mi intención...
No busques más allá del límite de la vida,
absurda y desconocida.
No quieres cerrar los ojos para siempre,
no es tu intención...
Consecuencias y sensaciones de amarga tristeza,
árboles cruzados que desnudan su alma
con esa antigua canción.
Mi naturaleza respira esperanza y bondad,
mi instinto animal provoca en ti
una felicidad necesaria e inmortal.
No quiero escuchar palabras desnudas,
no rezo en el aliento de un huracán,
mi naturaleza absorbe tus sentidos
más opuestos, creyendo...
Creyendo en el verbo "Resucitar"
a veces de obsesión, otras veces por obligación,
sentimental.
Costumbres anormales en la tierra de tus ojos,
ciegos de tanto nadar,
en montañas dolorosas,
en mi humilde naturaleza que cubre el interior
de inéditas canciones, de esas maravillosas rarezas.
Común de pasión,
tantas veces un abrazo es necesario
aunque venga de muy alto,
singular de tradición...
¿Es más duro este camino solo que acompañado?
No quiero promesas, falsedades,
no quiero momentos que parecieron bonitos
y se convirtieron en irreales,
no deseo perder el sabor de un beso,
no querría olvidar a que saben aquello momentos,
donde una garganta me hacía viajar
a un lugar tímido y sagrado,
no es mi intención....
(c) 2011
